En la vuelta disputada en el Estadio Nacional, Erick Andino marcaría un doblete en los minutos 19 y 49 poniendo el marcador 2-0 y Carlos Discua marcaría el 3-0 en el minuto 74 sentenciando el partido y el marcador global 7-1, siendo el más abultado en la historia de las finales de la liga nacional, con esto Motagua no solo lograría su decimoquinto título sino también su tercer bicampeonato y el tercer título obtenido bajo la dirección técnica del argentino Diego Martín Vásquez.